+ Carry on my wayward son

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miércoles, 19 de febrero de 2014

No te mentiré.

No te mentiré...
Si me preguntas si estoy mal... No en realidad no lo estoy.
Y si me preguntas si estoy bien... No te mentiré, tampoco estoy bien.

Es algo indeciso y contradictorio. Si no estas bien ni mal... Entonces, ¿Qué estas?

No te mentiré... Si me preguntan que si me importas... Pues claro, algo me importas pero a lo mejor no todo lo que tu podrías o querrías desear.
No te apreció tanto como te tendría que apreciar, no porque sea egoista, simplemente es un deber... Todo el mundo lo tendría que cumplir pero yo en muchos casos me he saltado esa ley.

Me puedo describir como que estoy en un estado de confusión y como que esto ya lo he vivido antes, que no es tu primera vez ni creo que sea la ultima... Pero ya hacia tiempo que no eras así, que no pensabas así ni reaccionabas así.
Bueno, hace 2 años sí... Solo tú puedes saber que has vivido, pensado e imaginado durante estos 2 años que te he apartado seriamente de mi vida y creo que hasta ahora, era lo mejor que pude hacer.
Y me pregunto si es un error esto de volverte a introducir en mi vida, en mi día a día o simplemente será otro destrozo para mi magullada vida.

He madurado, eso claro... Pero me siguen cabreando las mismas cosas y quieras o no en el fondo hacen daño porque al fin y al cabo sigo llegando siempre a la misma pregunta... (Esa pregunta que todos, tarde o temprano y repetidas veces nos la hacemos...) ¿Por qué a mi?
Llevo luchando toda la vida para que no e mientan y que sean sinceros conmigo pero tanta sinceridad y de golpe creo que no es sano para nadie, no lo era para una cría de 9-10 años y creo que por mucho que haya madurado tampoco lo es para una chica de 15 años.

La palabra morir me causa muchos escalofríos, me causa tristeza y una inmensidad de preguntas, preguntas de lo más curiosas.
Pero, dependiendo de que boca sale esa palabra me causa un paro de el corazón, un segundo sin respiración, un disparo o el silencio más rompedor.

Tengo ganas de morirme -dijo con más mena preocupación.
Ella, sin saber que contestar... Se quedo callada y pensando que no era la primera vez que escuchaba esa frase, sabia que tampoco seria la ultima... Esa frase era su vieja enemiga que le torturo durante muchos años la infancia y que de una forma o otra había renacido para al parecer volver a aquellos tiempos de dolor e incertidumbre de la chiquilla.
¿Crees normal decirle eso a tu hija? -Le salió la vena de furia y dolor que apenas unos meses guardo para volverlo a intentar, volverle a dar una oportunidad.
No -Contesto.

Cada vez que lo recuerdo antes y ahora... Me recrea un odio, una furia y un tremendo asco.

Esta enferma, pero creo, que no me lo creo del todo. Nadie en el mundo, aun estando enfermo, podría llegar a hacer el daño que ha conseguido a hacer ella. Destrozar vidas, oscurecer recuerdos y acostumbrarte a las lagrimas. Todo eso ella lo consiguió con unas simples frases o hechos que nos marcaron a todos.

Tanto por fuera, como por dentro.


 

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